jueves, 11 de agosto de 2011

VERSOS Y POEMAS PRIMERA PARTE

SENTIR

Sentir no quiero
la cascada de tu risa
navegando en mi recuerdo
y la cadena de tus brazos
arropándome en tu pecho.

Sentir no quiero
tu palabra enamorada
acariciando mi lamento;
y la lluvia de tus montes
seduciendo mis silencios.

Sentir no quiero
tus colinas encrespadas
devorando mis desiertos;
y el oasis de ternura
que tejes con el beso.

Sentir no quiero
el alcón de tu mirada
desafiando mis intentos
y el amor de tu capricho
galopando en mis inviernos.

Sentir no quiero
el perfil de tu silueta
esculpiéndose en mi huerto;
y la mujer que se somete
al primer roce de tu fuego.

Sentir no quiero
la agonía que se siente
al sentir que no te tengo...
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YO HUELO A TI

Yo huelo a ti.
Me persigue tu olor, me persigue y me posee.
No es este olor un perfume sobrepuesto sobre ti,
no es el aroma que llevas como una prenda más:
Es tu olor más esencial, tu halo único.
Y cuando ausente mi vacío te convoca,
una ráfaga de ese aliento me llega del lugar más tierno de la noche.
Yo huelo a ti
y tu olor me impregna después de estar juntos en el lecho,
y ese fino aroma me alimenta
y ese aliento esencial me sustituye.
Yo huelo a ti.

Algún día te escribiré un poema que no
mencione el aire ni la noche;
un poema que omita los nombres de las flores,
que no tenga jazmines o magnolias.

Algún día te escribiré un poema sin páajaros,
sin fuentes, un poema que eluda el mar
y que no mire a las estrellas.

Algún día te escribiré un poema que se limite
a pasar los dedos por tu piel
y que convierta en palabras tu mirada.
Sin comparaciones, sin metáforas,
algún día escribiré un poema que huela a ti,
un poema con el ritmo de tus pulsaciones,
con la intensidad estrujada de tu abrazo.
Algún día te escribiré un poema, el canto de mi dicha.

Atolondrado y confuso,
demasiado lleno de ruidos,
sin centro ni reposo,
desconectado del otro lado de la piel,
atormentado por el interminable crujido de este corazón
-tierra cuarteada, ceniza gris en el pecho-,
así pasan estas noches de calor y duermevela,
estas noches en que no estoy contigo.

Tu voz por el teléfono tan cerca y nosotros tan distantes,
tu voz, amor, al otro lado de la línea,
[y yo aquí solo, sin ti, al otro lado
de la luna,
tu voz por el teléfono tan cerca, apaciguándome,
y tan lejos tú de mi, tan
lejos,
tu voz que repasa las tareas conjuntas
o que menciona un número mágico,
que por encima de la alharaca del mundo me habla para decir en lenguaje
cifrado que me amas.
Tu voz aquí, a lo lejos, que le da sentido a todo,
tu voz, que es la música de mi alma,
tu voz, sonido del agua, conjuro, encantamiento.
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PROPOSITO

No menciones el amor: bien sabes que sería profanarlo.
Déjalo ser en silencio, para que sienta la música
de los dedos que rozan una piel amada.
Pero cállalo. Dedica tu babosa palabra a la pena;
Exhibe sin pudor la dureza de tu corazón y así
confirmarás que esa llaga ya no duele;
ah, tu corazón, esa zona manida de ti, sabia,
anestesiada, infeliz.
No, no menciones el amor; déjalo crecer en silencio,
Aliméntalo con silencio, compártelo sin decirlo
y solamente tartajea tu palabra para secretar tu viscoso veneno,
la amarga poción de tu cautela.
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CANTAR POR CANTAR

Poseso por una resonancia,
el eco armonioso de un lugar sin ruidos,
bañado por la luz amarilla de la luna llena:
una roca de grafito refleja sus destellos
y ella se mira en este espejo sin nubes por testigo.
Poseso por una resonancia,
alguien dentro de mi aparece y me transforma,
una risa de otro que recoge la luz preferida por la luna.
Puedo oír el eco del silencio absoluto,
Es el sonido de la sombra de la hierba
Iluminada por el metal de esta luna precisa.
Poseso por una resonancia,
El tiempo transcurre en varios ritmos, pero no hay
pasado en este cuento,
alguien que soy yo, dentro de mi aparece
y me dicta cosas que ignoro.
Y obedezco.
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Podra nublarse

Podrá nublarse el sol eternamente;
Podrá secarse en un instante el mar;
Podrá romperse el eje de la tierra
Como un débil cristal.

¡todo sucederá! Podrá la muerte
Cubrirme con su fúnebre crespón;

Pero jamás en mí podrá apagarse
La llama de tu amor.
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